Ciencia básica

Hace tiempo que tenía en el tintero hablar de ciencia, ciencia básica e investigación. Estos días he escuchado y leído algunas de las últimas entrevistas que dio Margarita Salas y me parece que el mejor homenaje que se le puede hacer es hablar de ciencia.

¿Pero por donde empiezo? La ciencia como concepto es un campo infinito y que engloba a decenas de disciplinas, supongo que cuando la gente piensa en científicos se imagina precisamente a gente como Margarita Salas, con sus batas blancas, en sus laboratorios entre probetas y pipetas, esta desde luego es la imagen que puede proyectar un laboratorio de bioquímica. Pero dudo que un físico experimental se haya puesto una bata blanca en la vida.

En el fondo la ciencia es ese cumulo de disciplinas que aplican el método científico y la experimentación empírica para buscar las respuestas a todas aquellas preguntas que nos formulamos. Es esa hija de la filosofía que ambicionaba obtener respuestas objetivas, empíricas y contrastables, dejando por el camino las grandes preguntas y centrándose en las cosas que podía entender, que son cada vez más fundamentales y entran en la raíz de la construcción del mundo, de la realidad y del pensamiento.

La ciencia básica es toda aquella investigación que tiene como mero objetivo el conocimiento, contribuir al saber global de la humanidad, esas son la investigaciones que durante toda su vida ha desarrollado Margarita Salas (y millones de otros científicos), y son esas investigaciones, esa ciencia básica la que nos dota la de los bloques de conocimiento necesarios para el posterior desarrollo de aplicaciones reales en la vida de las personas, como aplicaciones médicas, industriales, o contra el cambio climático.

Saciar nuestra curiosidad justifica cualquier investigación.

Porque desde mi naive posición de físico (en proceso), a mí el simple objetivo del conocimiento por el conocimiento justifica todas las investigaciones, el problema es que estas no se pueden hacer sin financiación, y aquí la clave del problema. Salas lo revindicaba constantemente en sus últimas entrevistas, la ciencia necesita financiación. La sociedad debe ser consciente de la importancia de la ciencia como motor fundamental para el futuro, no por capricho de unos señores en laboratorios, sino por el progreso de la sociedad y la construcción de un mundo algo mejor. Porque la investigación en España es buena, muy buena permítanme decir, es un auténtico milagro lo que hacen los equipos de investigación con los presupuestos que tienen, por eso al final muchos jóvenes que no ven futuro, tienen que irse a otros países donde se les reconoce y la financiación tanto pública como privada les permite investigar.

La ciencia nos lleva a hacernos preguntas que nunca antes nos habíamos planteado

La bioquímica y biotecnología es un campo con infinitas posibilidades ahora mismo con la edición genética y el estudio del genoma humano en la boca de todos. He tenido la suerte de conocer y tener largas discusiones sobre esta ciencia que introdujo en España Margarita Salas, siempre desde mi desconocimiento y mi infinita curiosidad por aprender, y es un campo que verdaderamente ha logrado suscitar mi interés y es que al final hay muchas veces que las líneas entre las diferentes disciplinas científicas se desvanecen y la biofísica nos lleva al estudio de los mecanismos biológicos como sistemas complejos, y la ciencia nos lleva a hacernos preguntas que nunca antes nos habíamos planteado.

Y me gustaría saber de todo, me gustaría poder conocer todos los campos del saber, pero la cantidad de conocimiento con el que cuenta la humanidad en este momento lo hace imposible, a pesar de ello si os amino a tener una curiosidad incansable, porque si es posible conocer una infinidad de campos desde una visión divulgativa, permitiéndonos tener una visión global de los retos científicos y todas las conexiones y formas de entender el mundo desde esta visión empírica que nos proporciona la ciencia.

Porque la ciencia tiene un valor clave, y es el hecho de que es independiente de ideologías, la ciencia es objetiva, es lo que es, y puede equivocarse, y muchas veces lo ha hecho, porque futuros avances nos permitirán entender cosas que en estos momentos están fuera de nuestro entendimiento. Y precisamente unos de esos campos que se vislumbra tremendamente complejo y que la investigación científica solo a esta empezando es el cerebro humano, Salas lo menciona en sus ultimas entrevistas, la neurociencia nos puede llevar a entender el funcionamiento de nuestro cerebro, decodificar nuestra forma de pensar, nuestros sentimientos. Y es que es precisamente eso, nuestro cerebro, donde reside la razón, la emoción, el pensamiento crítico, todo aquello que nos diferencia de los animales, lo que nos hace humanos. Y da vértigo, da vértigo pensar, pensarnos, como algo que la ciencia puede descifrar. Entramos ya en terreno pantanoso, hasta ahora reservado a la filosofía.

Pero al final la ciencia lo que busca es empujar las barreras del conocimiento de nuestra realidad, de nuestro mundo y de nosotros mismos.

Y en España Margarita Salas fue una mujer pionera en eso, una verdadera influencer, pero son muchos los que están ahora y estaremos en un futuro en esa posición, y hoy más que nunca es vital revindicar ante la sociedad y las instituciones la importancia de la ciencia.